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Estrategia es decir que no

La habilidad verdadera de los emprendedores está en el hecho de saber decir que no. Decir que no a todo lo que no le agregue valor a nuestro proyecto, que representa un 90% de las cosas que se podrían hacer, y no sólo eso, sino que también saber hacerlo a tiempo.

Estrategia es decir que no… Y hacer lo que hay que hacer

Hace poco me llegó este breve post de Pascal Finette en The Heretic llamado “Estrategia es lo que no hacés”, que hace hincapié en lo que el equipo emprendedor debe enfocarse una vez definido el objetivo y a las cosas que deben rechazarse si no cumplen con esta prima.

Esta es una cuestión muchas veces pasada de largo, y es una de las causas más comunes que causan problemas en las startups; dado que ante cada oportunidad que surge, la toma de decisiones del día a día se desvía para prestarle atención a las nuevas pertinencias. Si bien podríamos considerar como augurioso este hecho, la verdad es que no lo es si termina condicionando el foco y la energía puesta para el verdadero objetivo del emprendimiento, el que se planteó estratégicamente y el que se está persiguiendo.

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Tal como menciona Pascal Finette, la habilidad verdadera de los emprendedores está en el hecho de saber decir que no. Decir que no a todo lo que no le agregue valor a nuestro proyecto, que representa un 90% de las cosas que se podrían hacer, y no sólo eso, sino que también saber hacerlo a tiempo. El desafío concreto está entonces en saber detectar las oportunidades correctas, descartar las que no contribuyen con la visión a medio o largo plazo y enfocarnos en el 10% restante, que generalmente debería ser generar ingresos, o vender.

Parece fácil, pero no lo es. En el día a día los emprendedores se ven obligados a tomar cientos de decisiones. Algunas triviales, otras más importantes. Tener la habilidad de detectar aquellas que pueden llevarnos a que nuestra startup marque alguna diferencia es la clave.

Lo leí en el Medium de Alex F. Ochoaizpuro